Málaga-Almería: capítulo desconocido

Yo supongo que con la memoria de los pueblos pasa como con la memoria de las personas: que hechos muy traumáticos se borran -como quien no quiere la cosa- por una cuestión de salud.

cartelO así me explico que sea a estas alturas cuando descubro la masacre de la carretera de Málaga a Almería, uno más de los horribles capítulos de la Guerra Civil Española. Lo extraño de que no lo conociera es que mi madre nació en un punto de esa carretera; que yo he veraneado más de una vez en un lugar de esa carretera. Y aunque no fuera en La Herradura donde se dieran los peores momentos del éxodo, se me hace raro que por allí nadie lo recuerde o lo explique ni siquiera de vez en cuando.

Resumiendo: cuando Málaga, un bastión resistente a las tropas Nacionales, fue tomada, miles de personas iniciaron una huida a la desesperada hacia Málaga. A la desesperada, porque la carretera, que bordea toda la costa, era vulnerable por tierra, mar y aire. Y triplemente fueron atacadas y asesinadas miles de personas durante ese trayecto.

más genteLa liebre ha saltado por un artículo publicado en El País, en el que se habla del testimonio de Norman Bethune (él solo merece artículo aparte; un canadiense comunista, considerado el primero -o casi- en hacer transfusiones de sangre en el campo de batalla español), que estuvo en esa carretera.

Afortunadamente, hoy no es difícil investigar (ni que sea la superficie) de cualquier cosa. Así que dejo aquí mi mejor hallazgo: una página de homenaje y recuerdo a las víctimas. Espeluznantes los testimonios, como todos los que tienen que ver con cualquier guerra. Y en mi caso, le otorgan un nuevo sentido a un paisaje sentimental que ahora se ensancha.

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